Está situado en el paraje de la ermita de Nuestra Señora de Loreto (anterior Santa Ana), data del siglo XVI, puente alzado con cinco ojos de piedra de granito, de gran sencillez y sobriedad, que a su vez le confiere una gran elegancia;. Sirve de acceso a la ermita de la Virgen de Loreto, contemplando desde su empedrada calzada la fachada de dicha ermita.

Está situado en el paraje de la ermita de Nuestra Señora de Loreto (anterior Santa Ana), data del siglo XVI, puente alzado con cinco ojos de piedra de granito, de gran sencillez y sobriedad, que a su vez le confiere una gran elegancia;. Sirve de acceso a la ermita de la Virgen de Loreto, contemplando desde su empedrada calzada la fachada de dicha ermita.